Entre 1993 y 2002 Renfe sometió a una reforma y
modernización a 160 unidades de la serie 440, formada en origen por 255
ejemplares: 104 para Cercanías (99 de tres coches y 5 de dos coches, las
protagonistas de esta entrada) y 56 para Regionales, posteriormente
matriculadas como serie 470. De igual forma, 66 unidades fueron reformadas con
muchos elementos comunes a la reforma realizada por Renfe, con destino a la
venta a Chile y Brasil.
La reforma de las 440/470 consintió básicamente en la
modernización del interiorismo de las unidades: diáfano, con asientos
específicos para Cercanías o Regionales, megafonía y aire acondicionado. Esta
reforma supuso a nivel técnico la instalación de un convertidor estático necesario
para la alimentación del aire acondicionado, adicional al Grupo Motor Alternador
original, que se mantuvo, si bien en caso de incidencia del GMA el convertidor
estático es capaz de suministrar energía para el resto de servicios. Este
convertidor, junto al nuevo WC por vacío y la plaza PMR se encuentran en el
coche remolque intermedio, por ello que no sea posible retirar el remolque
intermedio en las unidades reformadas, algo factible con las unidades en estado
original cuando fue necesario.
Las 440 reformadas de dos coches
Entre todas las 440 reformadas de Cercanías, existieron
cinco unidades muy peculiares. En 1992 se autorizó la circulación de unidades
440 en el servicio del Transpirenaico Occidental para la sustitución de las
suizas 438, dotadas de dos coches y freno reostático reforzado. Entre las
prescripciones que se impusieron para poder circular entre Ribes de Fresser y
La Tour de Carol estaba la de que las 440 deberían hacerlo en composición
motor-remolque cabina (Consigna Serie C-Nº136 de 21 de octubre de 1992). Diez
unidades originales fueron seleccionadas para este servicio, con una puesta al
día y el refuerzo de las resistencias de frenado, además de por supuesto la
retirada de su remolque intermedio. Fueron conocidas como «Delta» por el tipo
de servicio que prestaban.
La 440-237 entra en la estación de Puente de los Fierros con el tren León-Gijón. Fotografía de José Luis fernández |
Pasado el tiempo, surgió la necesidad de disponer de
material modernizado para los servicios de la línea internacional, por lo que
la solución pasó por la reforma específica de varias unidades 440 sin remolque
intermedio. La reforma fue realizada a cinco de las unidades Delta en 1998, con
coste económico más elevado que la inversión realizada en el caso de las de
tres coches, al utilizarse un diseño y piezas específicas para encajar todos
los equipos en los bajos de los coches. Esta reforma fue costeada por el
gobierno de Catalunya, motivo por el cual estas unidades quedaron cautivas de
este servicio.
El GMA ubicado en
el coche remolque cabina originalmente fue sustituido por un convertidor
estático de mayor capacidad que el instalado en las 440 reformadas de tres
coches, y el WC también ha sido instalado en este coche. En el interior fueron
instalados asientos del mismo tipo que las 470 (en realidad se trata de un
retapizado de los asientos originales de las 440 de serie alta) y portaskies,
dada la existencia de esta demanda en la línea que atiende la estación de sky
de La Molina. El total de plazas sentadas era de 195 viajeros.
En 2008 las unidades 440 pirenaicas fueron sustituidas
por unidades 447, con mayor capacidad y comunes para el resto de servicios lo
que simplificaba los turnos de material. Durante un tiempo también se especuló
con la construcción de un lote de unidades Civia diseñadas específicamente para
esta línea, que cuenta con rampas de hasta 45 milésimas, denominadas por
entonces como «Civia Alpina».
Las unidades de dos coches reformadas pasaron a prestar
servicio en Cantabria, en donde realizaban servicios de Cercanías y también el
servicio regional Santander-Valladolid, junto a otras unidades 440 reformadas
tras la desaparición de las unidades sin reformar. Aunque no está confirmado,
en este periodo una de las unidades llegó a realizar el servicio regional
León-Gijón.
Sin embargo, esta situación duro pocos meses, pues en
octubre de 2009 las cinco unidades ya estaban retiradas del servicio, tras la
llegada a Santander de unidades de la serie 446 para las Cercanías Cántabras y
440/470 reformadas para los servicios de Media Distancia.
El fin de las 440 de Cercanías
A partir del año 2008 Renfe Cercanías comenzó a apartar unidades
440 reformadas ante la llegada de los postreros lotes de Civias. En aquel
momento, las 440 de Cercanías se convirtieron en un material excedente tras la
llegada masiva e irracional de trenes nuevos, vendida por el Ministerio de
Fomento dentro de una campaña por disponer la flota más moderna de Europa.
Esta medida supuso que las 440 reformadas fueron
apartadas en bloque durante el año 2009 y acabaron estacionadas a la intemperie
en diversas estaciones como Móra la Nova, Altasasua, Irún, Castillejo y
Algodor, e incluso en la continuación de esta junto a otros trenes en la vía
muerta que fue la antigua línea a Toledo en ancho ibérico, formando una larga
cola kilométrica. En el caso de las 440 pirenaicas fueron enviadas a Algodor en
primera instancia, salvo la 440-252 que se quedó en Santander donde fue
empleada para suministrar piezas para otras unidades y finalmente fue
desguazada.
En un principio se habló de una posible transformación de
un importante número de unidades con destino a Argentina, dentro de la venta de
trenes que se estaba llevando a cabo, lo que obligaría a una profunda transformación
para trabajar con alimentación de corriente alterna. También se rumoreó el
interés de CP por varias unidades para la línea de Cascais, la única del país luso
en corriente continua, aunque al estar alimentada a 1500 voltios obligaría a una
sencilla modificación.
De esta masacre se escaparon 30 unidades 440 que pasaron
a Media Distancia, dado que disponían aún de kilometraje por recorrer desde su
última revisión y eran necesarias. Se han mantenido en la serie 440, salvo una
rematriculada como 470, aunque recibieron decoración y unos nuevos asientos
específicos y diferentes a los de las 470. La base de León recibió varias de estas
unidades y es frecuente que una de ellas recorra la Rampa de Pajares prestando
el servicio regional.
Recuperación de las 440 reformadas de dos coches
Tras varios años apartadas, alguien se acordó de las 440
de dos coches para devolverlas a la vida. El nombramiento de Alberto García
como Director de Viajeros supuso una revolución en Renfe, al gestionar con inteligencia
los recursos disponibles en aras de prestar el mejor servicio y captar nuevos
clientes. En diciembre de 2013 el gobierno autorizó el contrato con Renfe para
la prestación de los servicios considerados como Obligaciones de Servicio Público
(OSP). Para determinados trenes de estas OSP era interesante reducir el coste
de explotación de los trenes, por lo que las 440 de dos coches eran muy adecuadas,
junto a los 596, también varios ya apartados; precisamente estos pequeños
automotores diesel habían nacido tres lustros antes para contener los gastos de
explotación en líneas con baja demanda.
De esta forma, entre finales de 2014 y principios de 2015,
las cuatro unidades pirenaicas supervivientes volvieron a la vida tras su paso
por el TCR de Málaga, obligado tras el tiempo que permanecieron abandonadas. Dos
de las unidades, 440-207 y 440-239 se pintaron con los colores de Media
Distancia, franjas naranja y morado, y las otras dos con dos franjas moradas
(esquema Intercity), 440-236 y 440-237. Inicialmente las 440 se repartieron
entre las bases de León y Miranda de Ebro, una en cada esquema. Entre los
trenes a realizar por las UT de Miranda estaba el servicio de Media Distancia
Miranda de Ebro a Bilbao, recuperado tras muchos años sin servicios regionales
en esa línea. Las leonesas, además de visitar la Rampa de Pajares, también se
ocupan de trenes León-Valladolid y Valladolid-Ávila.
La primera de las unidades «resucitada» que ha circulado en
Asturias, la 440-239, lo hizo el día 7 enero del 2015. Tras realizar el
servicio regional León-Gijón esporádicamente, esta unidad con base en León está
prestando en la actualidad desde hace meses servicios en las cercanías de
Asturias como unidad de reserva, en tanto en cuanto las Civias asturianas han
ido pasando revisión general. Uno de los pocos servicios que realiza regularmente
es un tren directo Oviedo-Avilés y regreso a primera hora de la mañana de los
días laborables.
Poco tiempo después, en abril de 2015 apareció por la
Rampa la 440-237 ya que pasó a depender de León. En 2016 la 440-236, también ha
pasado a depender de la base de León, y en la actualidad es la unidad que
circula ocasionalmente por la Rampa con el regional, alternando con las 440/470
de León de tres coches, pues parece que recientemente la 237 ha sido enviada a
Santander. Miranda conserva la 440-207,
que por el momento no ha venido a Asturias y se dedica a realizar trenes en la
zona, si bien el servicio a Bilbao ha desaparecido.
440-207 Color MD – Miranda de Ebro, servicio MD
440-236 Color Intercity – León, servicio MD
440-237 Color Intercity – Santander? Servicio MD
440-239 Color MD –León, reserva Cercanías-Asturias
Agradecer a Álvaro Fernández Guerra los datos
facilitados.
Agradezco al autor del texto la referencia, tan cariñosa como inmerecida.
ResponderEliminarEnhorabuena por el blog. Es fantástico!
Un saludo a todos.
Alberto García Alvarez
Muchas gracias por la lectura, Alberto. Todo un honor.
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