domingo, 25 de diciembre de 2011

Felices Fiestas

Entre los túneles de Las Nieves y El Canto de la Laguna...

martes, 20 de diciembre de 2011

Pajares, cordón umbilical

Durante muchos años, el ferrocarril con la meseta ha sido el cordón umbilical de Asturias con el resto del país; en los años 50, con los vuelos incipientes desde el problemático aeródromo de Llanera y la siempre complicada carretera N-630 a través de Pajares, la importacia de tener la vía expedita en Pajares era de vital para las comunicaciones. Las nevadas, los descarrilos o cualquier otra afección en la Rampa era sentida en toda la región.

sábado, 17 de diciembre de 2011

Los Maquis en la Rampa

Una vez pasada la Guerra Civil, muchos de los excombatientes republicanos exiliados a Francia que lucharon con la Resistencia francesa regresaron a España para continuar luchando contra el franquismo desde la clandestinidad, junta a otros que permanecieron tras la guerra escondidos. Desde la mitad de los años cuarenta hasta los primeros años cincuenta, en las montañas de todo el norte del país, desde Galicia a Cataluña y en otras zonas de montaña del interior como el Maestrazgo, Albarracín o Sierra Morena los Maquis, realizaron actos de sabotaje para boicotear al régimen, a la espera de que los Aliados, tras vencer al fascismo, liberasen a España. 

En Asturias fueron conocidos como los “fugaos” o los que se “echaron al monte” y de forma despreciativa por la Guardia Civil como "bandoleros". En la cordillera cantábrica sobrevivieron librando escaramuzas con la guardia civil y bajando a las poblaciones de los valles puntualmente para abastecerse, visitar a sus familiares o reunirse con los “enlaces” en la retaguardia. Tras los primeros esfuerzos con apoyo por parte de falangistas a sueldo con escaso éxito, la Guardia Civil se organizó mediante “la brigadilla”, que sin más juez que sus balas daban muerte a los guerrilleros cuando tenían oportunidad, además de amedrentar a sus familiares. 

 La Rampa de Pajares no pudo ser ajena a la acción de los Maquis, al tratarse de una línea estratégica para el "Nuevo Estado" como salida de los carbones asturianos, tan necesarios para la economía nacional en plena autarquía. La guardia civil no se lo pondría fácil, pues la Rampa estaba bien vigilada desde los propios trenes, caminos y aldeas. El 6 de abril de 1947 los Guerrilleros consiguieron dinamitar un poste de la electrificación en el P.K. 80,42, entre el túnel de Congostinas (Nº50) y la Roza (Nº 49), los que paralizó la circulación de trenes.
 
Pero esto les costaría caro, pues la prensa en el exilio, el “España Popular” publicado en México D.F., informó el 2 de mayo que dos guerrilleros fueron asesinados el 8 de abril por la Guardia Civil cuando intentaban colocar unos “petardos” en la vía. 

En el diario gijonés de  Falange, “Voluntad”, indica que los “bandoleros” no lograron paralizar el tráfico (cuando existen fotografías con el poste de electrificación derribado en el suelo que demuestran lo contrario), que la dinamita había sido robada de una explotación minera próxima, y que fueron detenidos varios de ellos y sus cómplices, gracias a la ayuda de la población civil, y que dos de ellos fueron muertos (asesinados) durante su captura.
 

A buen seguro que alguna otro sabotaje realizaron los Maquis en la Rampa, aunque haya quedado oculto como un simple accidente o avería y evitar dar publicidad al hecho, incluso durante algún tiempo se creyó que el descarrilamiento de Villallana sucedido en 1950 fue un sabotaje. Una de las mejores canciones del grupo pixuetu Llan de Cubel es la de “Cantar del ayerán que perdió la Guerra”, que trata de la temática de los maquis en la montaña central asturiana, en concreto en la zona de Col.lanzo, en el Conceyu d’Ayer, los valles y puertos inmediatos a Pajares.

   

Otra de las canciones dedicadas a los maquis asturianos es la de los “Fuagos” del grupo “Nuberu”, con imágenes de las película "Luna de Lobos", basada en la novela de Julio Llamazares.

 

sábado, 10 de diciembre de 2011

Overbooking...

Una punta de trabajo en el CTC cada vez que se cruzan tres trenes en alguna de las estaciones de la Rampa, resuelto elegantemente.