sábado, 21 de diciembre de 2019

El túnel de Rozadas

Ya hemos comentado anteriormente los problemas puntuales surgidos en la Rampa de Pajares, poco después de su terminación. Entre ellos se encontraba el túnel de Rozadas, que se encontraba cimbrado para evitar los desprendimientos que habían comenzado a producirse.

En el mes de mayo de 1885 la prensa se hacía eco de los movimientos de la montaña en el interior del subterráneo de Rozadas (o Las Rozadas, como también aparece escrito), por lo que las cerchas metálicas que estaban colocadas se habían cerrado. Esta situación obligó a que en los coches de viajeros empleados en la línea de Pajares hubo que recortar en tres centímetros el vuelo de los estribos de los mismos, para evitar su choque con las cimbras. Anteriormente, la garita de un guardafrenos había parcialmente arrancada al chocar contra una de las cimbras.

Boca lado Gijón del túnel de Rozadas. Fotografía de José Luis Fernández García. 

El túnel contaba con vigilancia continua y se estudiaba la forma de hacer un revestimiento completo que pudiera contener los desprendimientos, o incluso convertir el túnel en una trinchera.

En junio de 1885, el diario leonés «El Campeón» publicó que varias de las cerchas y tirantes colocados en el interior del túnel de Rozadas habían comenzado a reventar. Esta situación, por orden del inspector del ministerio de Fomento, obligó a que los trenes atravesaran el túnel en vacío para evitar riesgos. Los viajeros debían atravesar la montaña a pie por el camino exterior, con el consiguiente revuelo e incomodidades. La prensa asturiana y leonesa clamaba por el cierre de la línea hasta que el paso por la misma no supusiera ningún riesgo para los viajeros.

Los desprendimientos en el interior del túnel fueron a más e interceptaron el gálibo, por lo que los trenes ya no podían pasar por el túnel, y se realizaba el trasbordo de los viajeros hasta la inmediata estación de Linares mediante una vagoneta por el interior, junto al correo postal, lo que suponía un incremento de casi dos horas en el recorrido del paso por Pajares. Esta situación implicó en una ocasión a la familia del ministro de Fomento, esposa e hijos, que se desplazaba a Asturias a pasar el veraneo, y que llegaron a la estación gijonesa en plena madrugada, por lo que la presa de Madrid difundió el caso. A finales del mes de junio se realizaron las reparaciones oportunas para permitir el paso de nuevo del tren Correo, y unos días después, también el paso de mercancías de Pequeña y Gran Velocidad.

Conocemos que en el mes de septiembre, un tren que conducía cañones de gran calibre producidos en la Fábrica de Trubia, con destino a Filipinas, atravesó el túnel, En aquel momento la provincia española de ultramar se encontraba en los prolegómenos de su guerra de independencia, que estallaría meses después. Tras la apertura del canal de Suez, todo el tráfico marítimo entre la península y Filipinas se encauzaba a través del puerto de Barcelona. Conocemos este hecho, ya que a su paso, el tren provocó el choque contra los pies derechos de las cimbras. El jefe de artillería que acompañaba al convoy, al parecer, sufrió una gran conmoción.

En el mes de agosto el túnel se encontraba en reparación, junto al puente de Valdetocinos y el muro de La Parra. La compañía del Norte suspendió entonces los trabajos, que eran realizados por una contrata hasta el momento, para pasar a realizarlos por administración. Suponemos que ya con las obras reanudadas, la situación fue resuelta, por los propios intereses de la compañía ferroviaria.

La historia del túnel de Rozadas, o túnel 52, no estaría exenta de sucesos con posterioridad. En febrero de 1892 se cortaron 11 vagones de un tren de mercancías entre las estaciones de Linares y Navidiello y fueron a estamparse contra las paredes del túnel de Rozadas al haber descarrilado, con el resultado de la muerte del Conductor de Norte que viajaba en el vagón de cola, Agustín García. En la madrugada del 15 de junio de 1897 un cartucho de dinamita estalló en su interior, produciendo desperfectos en uno de los pies derechos del túnel.


1 comentario:

  1. Me parece un gran trabajo este artículo sobre el túnel de Rozadas, no sabemos al final como se resolvió el problema, saludos

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