Otro de los tráficos en la Rampa de Pajares presente en las últimas cuatro décadas es el transporte de madera, que con sus altibajos y variaciones de itinerario continúa en la actualidad. Al igual que sucedió con el tráfico de carbones, que en un momento invirtió su tradicional flujo, el transporte de madera pasó realizarse con destino a Asturias, cuando ésta era destinada a la entibación de las explotaciones mineras, a ser enviada fuera de ella, destinada principalmente a la producción papelera.
La madera de castaño iba
destinada a la fabricación de muebles en Portugal, construidos al modo
tradicional. Esta madera, de mayor valor que la de eucalipto, se cargó
principalmente en Trubia entre los años 1985 y 1991. El fin llegó cuando Renfe
elevó descaradamente el precio del transporte de este punto con el fin de
eliminar el tráfico de mercancías y concentrarlo en las otras estaciones antes
indicadas. Esta fue la estrategia comercial de la Renfe de esos años. Para su
transporte era empleados vagones de ejes abiertos con los bordes recrecidos,
serie X3 (serie UIC Ekklos), que por entonces Renfe transformó a partir de los
X1 para tales tráficos. Los vagones no podía ser cargados completamente, pero
no debido a la limitación del puente sobre el Nalón de la línea de Trubia,
categoría A-2, sino por la limitación del puente internacional sobre el río
Miño, categoría A-1 en aquel entonces, más restrictiva en el peso por eje y
metro lineal. Las estaciones portuguesas de destino eran las de Leixoes,
Penhafiel, Espinho y Paredes, motivo por el cual este tráfico era encaminado
por Galicia y la línea del Minho.
La madera de eucalipto,
era cargada en sus inicios en San Juan de Nieva, Lugo de Llanera, y también en
Trubia. Posteriormente se añadió la playa de vías del Centro de Transportes de
La Calzada de Asturias. Alguno de los trenes partía de la estación de
clasificación de Soto de Rey. Las estaciones de destino eran Zaragoza Miranda
de Ebro y Girona, junto a otras más esporádicas, como Pontevedra, San Juan del
Puerto y Cella.
Uno de los destinos
principales de la madera asturiana fue la fábrica de Miranda de Ebro, hasta
donde llegaban los trenes con las 7700 y 251 asturianas, incluidos la pareja de
maquinistas del depósito de Oviedo; se trataba de los uno de los servicios de
mayor distancia realizado por ellos. La fábrica mirandesa era la sucesora de
Fefasa, una factoría creada por el INI en la posguerra para fabricar fibras textiles
mediante el aprovechamiento de la paja del trigo, pero que a la postre resultó
un fracaso tecnológico. Fue reconvertida en una papelera a través de la empresa
pública Ence en 1972, y tras el paso por varias manos (Scott 1987, Kimberly
1996 y Rottneros 1991) llegó su cierre definitivo en 2009. En mayo de ese año
aún estaba grafiado un tren semanal entre Lugo de Llanera y Miranda de Ebro, el
83266/83267, con 850 toneladas de carga. Solo dos años antes era de dos
circulaciones semanales, de las cuales una de ellas procedía de la estación de
La Calzada. La maniobra de este tren era complicada, pues la estación de La
Calzada nunca fue completada, y los trenes debían maniobrar y ser expedidos
desde la estación de largo recorrido de Gijón-Jovellanos.
En 2009 también se cargaba madera desde las estaciones de San Juan de Nieva y Lugo de Llanera, con destino a Zaragoza. En 2012 este tráfico era diario, con el tren 83218/83219 San Juan de Nieva-León, con 950 toneladas y locomotora 251 asignada. Este material continuaba a Zaragoza Corbera Alta, con 2000 toneladas, al agregarse el material procedente de Monforte de Lemos. Este tren era remolcado por una pareja de 269.0 de la base de León y tras su retirada, un par de años después, por una pareja de 333.3. En Corbera Alta nace actualmente el ramal a la factoría papelera de la Montañanesa, perteneciente a Torras Papel. Antiguamente, dada la inexistencia de este ramal, la madera era trasbordada mediante camiones desde la estación del Arrabal. En 2011 consta que hubo carga de madera en la estación de Viella con destino a Portugal.
En la actualidad, el
tráfico de madera se desarrolla dos días a la semana entre San Juan de Nieva y
León, para agregarse a otra rama gallega y continuar juntas a Zaragoza Corbera
Alta. No obstante, en ocasiones el tren parte de Lugo de Llanera, con vagones
cargados en esta estación. La tracción sigue confiada en las 251 y los vagones
empleados continúan siendo los XX. No obstante, de forma reciente se han
probado plataformas jaula, una prueba que también se realizó a mediados de los
noventa y no prosperó.